Dennis Kimetto, actual récord mundial de maratón. Fue cazador de topos, granjero, cultivó maiz…hasta que tomó la mejor decisión de su vida; correr profesionalmente.
Se crió junto a seis hermanos y sus padres. En su casa no había ni radio ni TV, pero un fortuito paseo por Eldoret aquel Lunes 25 de Septiembre del año 200o, cuando aún tenía 16 años, lo encontró frente a un viejo televisor de un bar comedor, asistiendo a una de las finales más épicas de los juegos olímpicos; Haile Gebrselassie venciendo a Paul Tergat en los 10.000 metros. «El recuerdo de esa carrera me inspiró. Desde entonces pensé si algún día podría hacer lo mismo y correr a ese nivel».
Hasta el año 2008 (con 24 años) se dedicaba a cuidar ganado y cultivar la granja familiar en su aldea natal; Kapngtuny, en Kenia. Un poco más joven, uno de sus primeros trabajos, fue cazar topos, por los cuales le pagaban 70 centavos de dólar cada uno.
Solía correr solo en los polvorientos caminos de Eldoret, hasta que se cruzó varias veces con el ya por entonces consagrado Geoffey Mutai, que además tenía un campus de entrenamiento. Geoffrey observó la velocidad y el paso que llevaba Dennis, y lo invitó a entrenar con su grupo y a concentrar en su espacio, apadrinándolo en sus inicios. Si bien Kimetto los dos primeros años alternaba entrenamiento con el cultivo de maíz y el cuidado de ganado, Mutai lo convenció de que se dedicara en tiempo completo a descansar y a entrenar.
«Mi padre me dijo que entrenara fuerte y que luchara, porque podría cambiar mi vida», cuenta el keniata. Nada fue fácil. «La primera vez que me paré en una línea de salida sentí miedo». En sus primeras carreras formales se rebajó la edad para pasar por junior. Ya en 2012, corrió su primer maratón y marcó 2h 04:16 en Berlín, el mejor registro de un debutante en la distancia.
En 2011 gana la Media Maratón de Nairobi, en lo que se considera su primer triunfo resonante.
Su nombre y rostro tomaron relevancia mundial cuando en 2012, dejó ganar a Geoffrey Mutai, su mentor, en Berlín, con la mejor marca para un debutante (2:04.16). Aquel regalo permitió que su compañero se llevara medio millón de dólares como vencedor del World Marathon Majors. Era su obsequio por convertirlo en una estrella y apadrinarlo en sus comienzos. Una «gauchadita».
En el 2013 venció en los maratones de Tokyo (2:06:50) y Chicago (2:03:45). Tiene un físico privilegiado para correr ; mide 1,71 y pesa 55 kilos.
Tras romper el récord y conseguir buenos contratos publicitarios y deportivos, compró una gran casa para su familia en Eldoret, amplió su granja y empleó a decenas de ex vecinos para que trabajaran sus tierras y tuvieran acceso a un mejor nivel de vida.
El 28 de Septiembre de 2014, en Berlín, destrozó el récord mundial de Maratón e impuso su marca de 2:02:57 superando por 26 segundos el anterior registro, de su compatriota Wilson Kipsang.
«Entrenamos con Geoffrey Mutai y un grupo donde hay muchos corredores con talento. Al plan lo hacemos nosotros mismos. Estamos entrenando en Kapngtuny, cerca de Eldoret. Los detalles del programa son un secreto, por supuesto. La dieta es la comida tradicional de Kenia: ugali, arroz, verduras y, algunas veces, carne».
«Faltan muchos años para bajar de las 2 horas en maratón. Lo primero es intentar superar mi récord y luego veremos qué sucede. No creo que mi generación logre bajar la barrera de las 2 horas. Tal vez la próxima generación lo haga».
Cada vez que se baja del umbral de un nuevo minuto, los 60 segundos, el nombre queda fijado de manera mucho más intensa en la memoria de los estadígrafos. Es el caso de Kimetto que se suma a:
Derek Clayton: bajó de 2:09 en 1969
Carlos Lopes bajó de 2:08 en 1985
Dinsamo con los 2:07 en 1988
Khannouchi con los 2:06 en 1999
Tergat bajó de 2:05 en 2003
Gebrselassie de 2:04 en 2005
Ahora Kimetto lleva el maratón por debajo de 2:03. La curva es evidente y ya ni los científicos que han dedicado horas y más horas al asunto parecen negar lo evidente, que en 20 años (o menos?) puede haber un hombre corriendo los 42,195 kilómetros en menos de dos horas. Dennis es parte esos locos por correr que llevan adelante de las construcción de ese camino.
Cuando le preguntan sobre a quién considera como el mejor maratonista de la historia, no lo duda; «Haile».
Kimetto es recibido en Kenia tras el récord mundial:
Y acá, la fabulosa maratón de Berlín, COMPLETA, con el récord mundial de Dennis:
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