Cuando empezamos a correr y a meternos cada vez más en el tema, descubrimos que hay decenas de opciones en zapatillas y que no da lo mismo un par que otro. Para no marearnos y para que no te vendan un buzón, tené en cuenta estas recomendaciones.
- Los locales multimarca y sus vendedores; «Te quedan perfectas»
Los chicos tienen que vender y vender.
No son todos, pero la mayoria de ellos no están lo suficientemente preparados ni capacitados para responder consultas técnicas sobre calzado. Mucho menos para hacer recomendaciones.
Podés hacer la prueba; entrá a cualquier local de estos y pediles un par de «supinadoras» para un peso mayor a 80 kgs, para entrenamientos de fondo (por ejemplo). Ante tal requerimiento, seguramente su reacción inmediata sea esta:
Paso seguido, intentará venderte CUALQUIER par de zapatillas con el poco técnico argumento de que «te quedan re bien, son muy lindas».
Elegí preferentemente locales de marca; por lo general estarás mejor asesorado. Los criterios a tener en cuenta y que cualquier buen vendedor bien preparado debería preguntarte;
Tu tipo de pisada: Pronadora, supinadora, neutra. Si no sabés esta información, es probable que en los buenos locales te ofrezcan analizar tu pisada, por lo menos con un método básico.
Tu peso: Cuánto más elevado sea tu peso, mayor amortiguación tiene la suela.
El volumen de entrenamiento que realizás: Hay zapatillas recomendadas para entrenamientos cortos y veloces (calidad) y otros para entrenamientos de fondo (largos y suaves, es decir, cantidad).
El tipo de entrenamiento: Sólo salís a trotar como hobby o tenés un plan con estimulos diferenciados como pasadas, fondos, cambios de ritmo?
La superficie donde corrés habitualmente: pavimento, tierra, arena, pista, césped, etcétera. No todas sirven para todo. Hay particular diferenciación entre las de calle y las de trail o montaña.
NOTA MENTAL 1: No todo lo que brilla es oro: no compres zapatillas simplemente porque son lindas o porque están de moda o porque son el último lanzamiento. Compralas por si son apropiadas para vos (y si son lindas, mejor para vos).
- No siempre lo más caro es lo mejor
Muchas veces caemos en la creencia de que lo más caro es mejor que lo más barato. Aplicando el mismo criterio que en el paso anterior, elegí lo ADECUADO, puede que no necesariamente sea lo más cosotoso.
NOTA MENTAL 2: Las zapatillas no son caras ni baratas. Son una inversión, y como tal, tenés que estar asesorado.
- Las zapatillas son una inversión en salud
Lejos de ser un elemento de lujo o de exhibición, las zapatillas son una inversión en confort, pero también en salud. Un calzado inapropiado podría ser riesgoso. Tené en cuenta que tu cuerpo al correr, recibe desde el suelo un impacto que triplica (por lo menos) tu peso corporal. Un calzado APROPIADO va a ser cómodo y protector.
No olvides que la amortiguación tiene vencimiento. Y no te guies por el estado de la capellada (parte superior, la que está a la vista) ni por el tiempo transcurrido en el calendario. El parámetro es la distancia recorrida. Por lo general se recomienda cambiar de zapatillas para entrenar y competir cada 700-800 kilómetros de uso.
NOTA MENTAL 3: No seas ratón miserable con la compra de zapatillas. Terminan siendo más baratas que un traumatólogo.
- El tamaño sí importa
Si te dijeron lo contrario, te mintieron descaradamente.
Mientras corrés, el pie tiende a hincharse un poco a medida que más kilómetros haces.
También cuando vas en bajada, el pie se desliza unos milímetros dentro de la zapatilla.
Por ambos motivos, es recomendable comprar medio número más grande.
Y a la hora de probártelas, hacelo en ambos pies y con los cordones anudados, ya que por lo general somos asimétricos y no es 100% garantía que si un pie las siente bien, el otro también. Camina y probá la sensación antes de abrir la billetera.
NOTA MENTAL 4: No seas precoz ni acelerado. Encargate de elegir el tamaño que te quede bien.
Ahora sí; a por ellas y buenos kilómetros!!
Buen Dia me podrian recomendar locales . saludos