Las intensas tormentas de nieve azotan desde hace días el nordeste de los Estados Unidos, el Central Park en New York es uno de los paisajes más fotografiados en la última semana. Pero además, en las últimas horas una particular imágen se vio en la zona donde se emplaza la llegada de la maratón de Boston, cuando un hombre anónimo, a fuerza de pala, se encargó de descubrir prolijamente la franja que delimita la finalización de la carrera. Esta es la foto que recorre el mundo:
Después del atentado de 2013, este lugar es una especie de «santuario» con un simbolismo muy fuerte para los habitantes de la ciudad, es por eso que hasta han tildado de «heróico» el gesto de este ciudadano, al haber limpiado la meta con tanto frío a esa hora del día.
La secuencia pertenece a Philip Hillman, quien el domingo inmortalizó el momento desde la ventana en el Hotel Charlesmark, en Boylston Street. Después, intentó identificar al desconocido con el hashtag #WhoShoveledTheFinishLine (Quién «paleó» la nieve?) pero en las primeras horas sus esfuerzos fueron en vano. “No sabemos quién es”, le dijeron en el Hotel; pero la imagen ya había dado la vuelta al mundo.
Así se lo agradecía el mismísimo Meb Keflezighi, el último cammpeón de la maratón de Boston por ESPN.com
Hasta que finalmente hoy miércoles se supo quién era el hombre de la pala. Su nombre es Chris Laudani, empeleado de un bar de la zona llamado Back Bay Social Club.
El propietario del bar dio a conocer la identidad de Chris a través de Twitter después de la foto se viralizara. «Sólo lo hice para enviar un mensaje… Me encanta el maratón de Boston y todo lo que representa, la línea de meta no se merece estar cubierta de nieve», explicó Laudani a Boston Magazine.
«Pensé que era una imagen poderosa cuando lo ví» dijo Hillman. «Viví en Massachusetts toda mi vida. Para nosotros, la línea de meta se ha convertido en tierra sagrada. Cuando miré y lo ví haciendo eso pensé, ‘¿No es genial?’. Me encanta mi ciudad. Simplemente pensé, Boston es fuerte («Boston strong» fue el slogan tras el atentado), y ni siquiera la tormenta no nos podía parar «.
Hillman, de 44 años, quien es gerente de distrito de Rodney Strong Wine Estates había ido al hotel a trabajar debido a los cortes de energía como consecuencia de la tormenta, que hacía que la nieve continuara cayendo mientras Laudani limpiaba la línea de meta.
La secuencia:
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